La gestión de residuos industriales no peligrosos: ¿Cómo se debe realizar?

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La gestión de residuos industriales no peligrosos: ¿Cómo se debe realizar?

No es ningún secreto que el sector industrial genera anualmente una enorme cantidad de residuos peligrosos y no peligrosos que exigen un correcto tratamiento para evitar contaminaciones o problemas medioambientales y de salud. Hoy, desde Arcediano Recuperaciones, nos gustaría hablarte sobre cómo debe realizarse la gestión de residuos industriales no peligrosos.

Lo primero que tenemos que apuntar es que el tratamiento de todos estos residuos es una obligación legal. Por lo tanto, no hacerlo podría acarrear duras penas y multas económicas para los responsables. Del mismo modo, también tenemos una «obligación» moral con la protección y el cuidado del medioambiente.

En Arcediano Recuperaciones somos expertos en la recogida y desguace de residuos industriales no peligrosos. Pero, ¿en qué consisten exactamente? Se trata de todos aquellos resultantes de los procesos de fabricación, transformación, utilización, consumo, limpieza y mantenimiento que se pudieran generar en el día a día de una actividad industrial. Dentro de ellos, podemos distinguir dos clases bien diferenciadas: residuos peligrosos y no peligrosos. En lo que nos atañe, los no peligrosos, se puede clasificar en:

  • Residuos inertes: no reaccionan ni física ni químicamente y no dan lugar a contaminación.
  • Residuos sólidos asimilables a urbanos: se entiendo que son aquellos que podrían generarse igualmente en domicilios particulares, oficinas o comercios.

La correcta gestión de residuos industriales no peligrosos

En una gestión de residuos industriales no peligrosos adecuada participan un mínimo de tres figuras básicas:

  • Productor: la persona que general los residuos y que debe hacerse cargo de ellos.
  • Poseedor: la persona física o jurídica que están en posesión de los residuos en un momento determinado.
  • Gestor: la persona o la entidad autorizada para llevar a cabo toda clase de operaciones de gestión de los residuos.

El tratamiento de esta clase de desechos comprende varias fases entre las que tenemos que destacar la recogida, el transporte y el tratamiento.

  1. Recogida de residuos
    Se instalarán contenedores, compactadores o maquinaria que para que todos los desechos puedan ser depositados y recogidos. Los contenedores son metálicos, de tamaño variable y pueden estar tapados o no.
  2. Transporte de los residuos
    Se trata de la segunda etapa de la gestión de residuos industriales no peligrosos y consistirá en vaciar todo el contenido de los contenedores o compactadores en vehículos apropiadamente equipados para el transporte y llevarlos a la planta de destino.
  3. Tratamiento de residuos
    En esta fase final, se llevará a cabo un proceso concreto dependiendo de la naturaleza del residuo en cuestión.

Del mismo modo, hay que tener en cuenta que, según marca la ley, existe una prioridad de actuación con los residuos. Así, lo ideal es la prevención en su aparición. Posteriormente, se tratará de que sean reutilizados, reciclados, llevar a cabo otra valorización del residuo y, finalmente y si no se ha podido englobar en ninguno de los campos anteriores, eliminarlo.