¿Cómo pueden clasificarse los residuos?

Gestión de residuos

¿Cómo pueden clasificarse los residuos?

Tras la presentación formal de nuestro blog, ha llegado el momento de ponernos manos a la obra y acercarte aquella información relacionada con la gestión de residuos que pueda resultar de tu interés. ¿Qué te parece si comenzamos por el principio y te contamos cómo pueden clasificarse los residuos? Si quieres conocer esta clasificación no dejes de leer este post que hemos elaborado basándonos en el contenido de la Ley 22/2011 de 28 de julio sobre Residuos y Suelos Contaminados.

Pensar en residuos y no en basura

El crecimiento de la población y la cultura de usar y tirar en la que vivimos ha hecho que la acumulación de basura se haya convertido en uno de los principales problemas medioambientales que existen hoy en día.

El primer paso para poner una solución a este exceso de desechos pasa por dar el salto de la “basura” a los “residuos”, entendiendo como “basura” aquellos materiales o restos sobrantes que no pueden ser usados nuevamente frente a los “residuos” que son materiales desechados que pueden tener valor si son reutilizados o reciclados.

Y tras esta primera aclaración, y de acuerdo con la Ley a la que antes hacíamos referencia, los residuos pueden clasificarse según su procedencia o según su biodegradabilidad o composición.

Residuos según su procedencia

1.- Residuos domiciliarios: Como podrás deducir por su nombre son los resultantes de las actividades domésticas diarias. Una gran parte de ellos son la denominada “basura” formada por restos de alimentos así como envases, vidrios, papeles… y otros artículos que sí pueden ser reciclados siguiendo las políticas de recogida de basura que hoy en día existen en todas las ciudades. Dentro de este grupo también se encuentran aquellos residuos procedentes de oficinas, negocios, centros educativos, hostelería…

2.- Residuos sólidos industriales: Son los residuos que generan los procesos de fabricación y transformación industrial de cualquier tipo de producto o servicio, quedando excluidos aquellos que resultan de las actividades administrativas, comerciales o de preparación de alimentos.

3.- Residuos hospitalarios: Dada la naturaleza de las actividades de las que proceden, se trata de recursos muy especiales ya que muchos de ellos pueden contener restos de tipo infeccioso, material quirúrgico, restos de tejidos humanos, fármacos… Considerados por lo tanto residuos especiales, reciben un tratamiento muy específico para su desecho o reutilización.

4.- Residuos de demolición y construcción (RDC): Una tipología aparte merecen los residuos que genera el sector de la construcción, también considerados especiales. Aunque suelen ser residuos inertes y sin gran poder contaminante, ocupan grandes volúmenes de ahí que resulte compleja su gestión y disposición final. Como te imaginas, nos referimos a escombros, yesos, ladrillos, maderas…

Residuos según su composición

1.- Residuos orgánicos: Compuestos por materias de origen vegetal y animal que se descomponen con cierta facilidad en la tierra y su impacto no es grave. Es el caso de muchos restos de comida, que en general son biodegradables y tienen capacidad para fermentar e iniciar un proceso de descomposición.

2.- Residuos inorgánicos: Son los residuos que al no estar compuestos por material orgánicos no pueden biodegradarse: latas, botellas, envases de plástico, colillas… y otros muchos desechos que tardan mucho tiempo en desintegrase y causan un terrible impacto sobre el medio ambiente cuando no se gestionan de forma correcta.

3.- Residuos peligrosos: Son aquellos residuos que constituyen un potencial peligro tanto para el entorno como para las personas que puedan entrar en contacto con ellos. Nos estamos refiriendo a productos radioactivos, restos de material médico, sustancias corrosivas…

Gestión de residuos

Y para finalizar esta clasificación previa a todo trabajo de gestión de residuos, no podemos dejar de mencionar otras tipologías consideradas especiales por la naturaleza tanto de la procedencia de los residuos como por sí mismos. Es el caso de los llamados residuos urbanos (restos de podas, limpieza de zonas públicas, mobiliario urbano), residuos informáticos (que incluirían tanto equipos informáticos como aparatos electrónicos) o los residuos espaciales (satélites y otras máquinas similares que ya han agotado su vida útil).

Seguro que esta no es la única clasificación que existe de los residuos que genera nuestra sociedad pero sin duda, hace un recorrido exhaustivo por la mayoría de los que pueden encontrarse. A partir de aquí, comienza el trabajo de Arcediano Recuperaciones que cuenta con más de una década de experiencia llevando a cabo un servicio eficaz e innovador en el sector del reciclaje y la reutilización y desecho de residuos.